Pies hinchados en el embarazo. Causas y consejos

Durante el embarazo tienen lugar en el cuerpo todo tipo de cambios, estos se producen para poder dar cobijo en el útero al bebé. Sin lugar a duda, un embarazo puede ser un momento lleno de felicidad y expectativa, eso no quita el hecho de que los cambios son muy drásticos y se producen rápidamente, por lo que provocan molestias y malestar.

Pies hinchados en el embarazo

Los pies también se ven afectados durante el embarazo, todos hemos escuchado alguna vez los síntomas más frecuentes que se pueden llegar a presentar durante el embarazo. La hinchazon de pies en el embarazo es uno de los síntomas más comunes y la pregunta más frecuente es cómo se puede evitar o tratar la hinchazón.

Tener los pies y tobillos hinchados resulta doloroso y molesto, caminar es más complicado, sin mencionar el problema del calzado, que por muy cómodo que sea puede que ya no ser la talla adecuada (durante el embarazo se aumenta una talla de pie, al menos). Esto, sumado al resto de síntomas y cambios que atraviesa el cuerpo de la mujer, resulta en una situación nada cómoda.

Causas de los pies hinchados en el embarazo

Durante el embarazo, los pies y los tobillos se hinchan debido a la retención de líquidos. Es muy probable que las manos también se hinchen por la misma razón. La hinchazón puede ser peor cuando suben las temperaturas y cuando se está mucho tiempo de pie, o en la misma posición.

La hinchazón puede estar presente durante todo el embarazo, pero es más común durante el segundo y tercer trimestre. También es importante mencionar que los pies y tobillos pueden seguir estando hinchados tras la llegada del bebé, esto es muy común e irá desapareciendo poco a poco.

Como aliviar los pies hinchados en el embarazo

Es posible aliviar las molestias producidas por los pies hinchados teniendo en cuenta ciertas cuestiones. El ejercicio moderado, bajo supervisión del especialista, ayudará con la retención de líquidos, a evitar el sedentarismo y a controlar el peso para que esté dentro de los parámetros recomendados. Se deben evitar los calcetines y el calzado demasiado ajustado, también es recomendable tener los pies en alto. Beber mucha agua, aunque parezca irónico, ayuda a retener menos líquidos. Evitar lugares en los que haga mucho calor, dentro de lo que sea posible, y un masaje en lo pies al terminar el día también ayudarán con las molestias.

Si bien es un síntoma muy frecuente, ante cualquier malestar fuera de lo común es muy importante consultar con un especialista. Nadie conoce mejor nuestro cuerpo que nosotros mismos, por eso debemos aprender a escucharlo y consultar con los especialistas adecuados cuando sintamos que algo no va bien.

Zapatos aconsejables durante el embarazo

Nunca se deberán usar los zapatos de antes de estar embarazada. Es un peligro. Deberán comprarse zapatos nuevos a su nuevo estado. Consejos:

a)En invierno:

Lo mejor sería un zapato cerrado con sujeción: Merceditas, tira velcro o similar. El piso antideslizante para evitar caídas o resbalones. El tacón muy bajito (máximo 2 cm.) para evitar torceduras de tobillo; ya que el centro de gravedad del cuerpo de la embarazada se desplaza, y peligra su equilibrio.

b) En verano:

Efectivamente, una sandalia fresca y cómoda con tiras anchas que sujeten el empeine y talón es lo ideal. El tacón deberá ser de cuña, para dar más estabilidad y no más alta de 2 cm. Piso anti-impactos y la planta anatómica. El producto será de piel auténtica y el forro transpirable.               

Desde Calzados Pradillo le aconsejamos nuestra selección de sandalias cómodas y anchas para cuidar sus pies durante el embarazo.