Zapatos cómodos Calzados Pradillo

Si usamos zapatos que no son de nuestra talla, sin sujeción o con demasiado tacón es probable que se deformen los pies, dejándolos en forma de garra.

La fascitis plantar es la inflamación del tejido elástico que va desde el calcáneo hasta la zona metatarsal. Esta estructura es muy importante para el mantenimiento de la bóveda plantar y para la acción de caminar.

Las durezas o callosidades son áreas de piel engrosada en la planta del pie o en el dorso de los dedos debido a una fricción o presión. Esta reacción puede aparecer en cualquier zona cutánea de nuestro pie por el roce con el hueso, con el calzado o con el suelo.

Las patologías de los pies pueden repercutir en la espalda, cadera, produciendo a la larga lesiones irreversibles. Debemos saber o pensar que en una superficie tan pequeña de diez decímetros cuadrados como es la del pie soportamos todo el peso y cargas verticales y laterales de nuestro cuerpo.

Cuando hablamos de dedos en martillo nos referimos a una deformidad que se origina normalmente en la segunda falange del pie. Esta anomalía suele afectar, por lo general, más a las mujeres que a los hombres porque ellas suelen ponerse zapatos con tacones.