Después de una larga temporada con zapatos cerrados vamos a ir desnudando poco a poco nuestros pies hasta quedarnos en sandalias.
A continuación le damos unos consejos para poder presumir de unos pies sin durezas, sin imperfecciones y bien hidratados.
Eso sí, además de seguir las recomendaciones, sugerimos visitar al podólogo ante cualquier complicación; nuestra Clínica Pradillo “El Sanatorio de los Pies” estará a su disposición.